¡Lo primero es lo primero! Para los días más fríos o cuando entrenes en una sala fría, echa mano del look a capas. Una chaqueta sin capucha y con cremallera te mantendrá caliente al principio de tu entrenamiento, pero no te estorbará para hacer un buen servicio. Los pantalones largos de entrenamiento con bolsillos dejan espacio para meter algunas pelotas de tenis.
Tanto si juegas en un pabellón como en la pista, los tejidos transpirables y ligeros son ideales para los días de calor. Los pantalones cortos te dan la máxima libertad de movimiento y los modelos con shorts cosidos mantiene todo en su sitio. Cuando se trata de camisetas, busca materiales de secado rápido para mantenerte fresco incluso durante los partidos en los que más se suda.